miércoles, 5 de agosto de 2009

Me pregunto...

Un ciclo más muere y comienza otro instantaneamente, una parte más de la rueda de la vida, un engranaje sucedido por otros más grandes y complejos. Un nuevo laberinto imposible de salir, hasta que nos damos cuenta que estamos afuera, salimos o aún no entramos - Espera! - ... ya entramos. Nos convertimos de a poco en marionetas de nosotros mismos, (IN)dependientes, donde cada cual cree decidir a qué aferrar sus hilos, a un Todo cambiante, o a la estabilidad de la Nada.

Todo concluido inconclusamente, tantas conversaciones pendientes y otras tantas perdidas desgraciadamente para siempre. Momentos, lugares, personas, sentimientos y emociones dejados en un rinconcito olvidado que de vez en cuando pasamos a visitar, ya maltrechos por la humedad de los inviernos y sofocados con las máximas del verano.


------------------------------ ¿Qué nos pasó?----------------------------










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o más bien...







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¿Qué nos quedó? ---------------------

1 comentario:

Anónimo dijo...

Nos quedó la certeza que algo se pudo rescatar, y más aún, que se puede proyectar directa o indirectamente en ti: el tedioso y necesario aprendizaje.

Pero pene con eso hoy. Al final del día nos queda una conversación que reafirma que no nos perderemos (no en nuestra amistad por lo menos)

Queriéndote más que la chucha (ahora)

Ratón ;D